ACU’s Founder and His Successor
The Agrupación Católica Universitaria (ACU), under the direction of the Society of Jesus, is a Marian Sodality of professional men that after fulfilling strict admission standards, as well as phases of faith, cultural and apostolic formation during their university years, commit to practice the gospel teachings imparted to them and made their own through Spiritual Exercises of St. Ignatius of Loyola: striving to fulfill their calling in life through self-perfection born of apostolic works that call upon personal intellect and efforts in order to ascend to positions of authentic spiritual leadership capable of influencing the values of society, so that it may make directional corrections and return to the path that brings it back to God.
At the time of the founding of the ACU in Havana (1931), Cuba’s Jesuits served under a single Jesuit Province in Spain. ACU’s Jesuit founder, Fr. Felipe Rey de Castro and his successor, Fr. Amando Llorente, the former from Brión, on the outskirts of Santiago de Compostela and the latter from Mansilla Mayor, just outside of León. Perhaps providentially, both towns were situated just kilometers away from one of the Catholic faith’s top three pilgrimages, the Camino de/a Santiago (St. James’ Way).
These two men of God surrendered themselves unconditionally and exemplarily to the students, the professionals and the works of the ACU unto their natural deaths, allowing God to work through them.
La Agrupación Católica Universitaria es una Congregación Mariana, fraguada dentro de los moldes de la Compañía de Jesús, de hombres profesionales, quienes, trasuna estricta selección, y una etapa de formación católica, cultural y apostólica, transcurrido en ella durante su período estudiantil, se proponen llevar a la práctica la doctrina evangélica comprendida y aceptada en los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola; buscando al hacerlo el fin del hombre por medio de la perfección individual concebida en función de la acción apostólica ejecutada con medios propios e intelectuales de modo de poder llegar a ocupar una posición ascendiente de verdadera jefatura espiritual capaz de influir de tal forma en los criterios de la sociedad, que ésta vaya rectificando el camino hasta tomar el que la devuelva a Dios.
Cuando se fundó la ACU en la Habana (1931) los jesuitas en Cuba servían bajo una sola provincia de los jesuitas en España. El fundador de la ACU, P. Felipe Rey de Castro y su sucesor, P. Amando Llorente, el primero de Brión, en las afueras de Santiago de Compostela, y el ultimo de Mansilla Mayor, cerca de León. Tal vez fue providencial que ambos pueblos se situaban muy cerca del Camino de/a Santiago, uno de los tres peregrinajes católicos más frecuentados.
Estos dos hombres de Dios se entregaron incondicionalmente y ejemplarmente a los estudiantes, profesionales y las obras de la ACU hasta sus muertes naturales, permitiendo que Dios trabajara por medio de ellos.
Apostles of Marian Sodalities
A visual storytelling of the beginning of the ACU with Frs. Felipe Rey de Castro and Amando Llorente.